6 formas de incrementar la motivación de los empleados en hostelería

motivación empleados hostelería

La hostelería es uno de los sectores más complicados que existen. Sus negocios están en continua evaluación por parte de los clientes, y mantener un alto grado de desempeño puede a veces llegar a ser complejo. Para que todo funcione de una manera más fluida y ese buen ambiente repercuta en el cliente, la motivación de los empleados en hostelería es, sin duda, parte importante del éxito.

Por eso, nos paramos hoy a analizar cuáles serían algunos aspectos claves y más eficientes de hacer que nuestros empleados se encuentren a gusto ejerciendo sus responsabilidades, se coordinen bien con su equipo, y se sientan parte de la empresa. En definitiva, cómo incrementar su motivación.

Cómo procurar una motivación eficiente a los empleados de hostelería

La formación es la clave

Uno de los grandes retos a los que se enfrenta la hostelería es la falta de mano de obra profesional. Muchos trabajadores recalan en el oficio prácticamente de rebote, y quizás no conozcan ni los conceptos más básicos. Es muy importante apostar por la formación, ya que aunque la experiencia pueda dotar a cualquiera de habilidades suficientes para desempeñar su puesto con profesionalidad, adquirir adecuadamente los conceptos base, aprender como es debido, y sentirse afianzado y convencido de lo que se hace es fundamental.

Además, no hay que olvidar que la digitalización es un factor relevante casi en cualquier negocio hoy en día. Por tanto, la formación en ese sentido se antoja como indispensable. No importa que tengas un modesto bar, el cliente valorará de manera muy positiva ser atendido correctamente.

Establece jerarquías y funciones

No tener claras cuáles son las funciones de los empleados supone un importante lastre en cualquier negocio, y más en la hostelería. Comandas que se pierden o platos que salen tarde, son solo algunos ejemplos. Para ello, todos los empleados deben conocer qué es lo que deben hacer, cuáles son sus funciones, y así, seguir una estricta jerarquía bien marcada por el organigrama del establecimiento. Dejar que las cosas funcionen sin control no tiene nunca ningún efecto positivo.

Como consecuencia, esto trae que debamos establecer reuniones periódicas con los empleados para reforzar cualquier idea, aceptar sugerencias, proponer cambios, recordar cuáles son las funciones de cada uno y cuál es el puesto que ocupa. Estas reuniones no deben ser vistas como un trámite, sino como un proceso de mejora que posibilitará fidelizar a los clientes y captar otros nuevos. Hay que recordar que la competitividad en este sector es muy alta. El giro que necesita tu negocio puede venir en gran parte de lo que te digan tus empleados, que son quienes están al pie del cañón todos los días.

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Gestiona bien los horarios y turnos

Otra de las maneras más efectiva de aumentar la motivación en hostelería es la correcta gestión de los horarios. Es cierto que la demanda nos obliga a adaptarnos a ella, pero siempre debe hacerse lo posible para mantener un horario digno. Y que ayude a los empleados en la difícil tarea de conciliar la vida familiar con la laboral. ¿Cómo pedirle rendimiento a un camarero que se ha marchado de madrugada y debe abrir a las 8 de la mañana?

Si somos propietarios o gestores, debemos ponernos en la piel de un empleado que lleva bastantes horas de pie dándolo todo. No, no se trata de echar a los clientes cuando se cumpla la hora, pero sí de favorecer que tu personal sepa cuándo debe comenzar a prepararse para acabar su jornada.

Proporciona incentivos

Apostar por los incentivos siempre funciona. Pueden ser de tipo económico, como repartir el bote de las propinas de manera justa, o bien mediante algo que resulte motivador. Desde bonos de descuento para el empleado y su familia, actividades de team building, obtención de algún tipo de regalo que interese a los empleados y que se consiga si se cumplen los objetivos… Hay multitud de ideas que puedes poner en marcha y que van a mantener a los empleados con un alto grado de motivación.

Agradece y reprueba, pero bien

El trabajo bien hecho siempre debe ser agradecido, ya que un simple gesto o palabra de reconocimiento tiene muchísimo valor para cualquier empleado de la hostelería. Si es necesario corregir alguna conducta o llamar la atención por algo que se ha realizado mal, procura no hacerlo en público. Se cita al empleado en privado, y con un tono firme pero conciliador y constructivo, se darán las instrucciones pertinentes para que ese hecho no vuelva a repetirse.

Recursos materiales

Dotar a los empleados y al propio negocio de hostelería de todo lo necesario para trabajar en óptimas condiciones también es una manera de motivarles. Proporcionarles siempre la ropa de trabajo cuando toca, así como todos los elementos para poder desempeñar su tarea bien, es una manera de comprometerse. De la misma forma, que las instalaciones estén cuidadas no solo conlleva que ellos trabajen mejor, sino que los clientes valoren positivamente tu negocio.

Todos estos consejos harán que la motivación de los empleados en hostelería crezca y que trabajen mucho más a gusto. Una plantilla motivada es capaz de dar la cara en los momentos más complicados. Tenlo en cuenta.

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