Tras el éxito del coworking de los últimos años, y en general el interés creciente por la filosofía colaborativa, surge en Estados Unidos el coliving. Movimiento principalmente promovido por las generaciones más jóvenes, este modelo de co-habitación se está convirtiendo en una nueva forma de concebir la vida, tanto a nivel personal como profesional.
Pero, ¿qué es el coliving?
Al igual que el coworking y el cohousing, y a pesar de que el término esté ya bastante extendido en nuestro país, el anglicismo coliving no goza aún de una entrada en el DRAE, al disponer de equivalentes en nuestra lengua (menos conocidos y menos utilizados, sin embargo).
El coliving viene a definir una nueva manera de compartir vivienda basada en un sistema que trata de favorecer las relaciones sociales entre los ocupantes, así como fomentar la creatividad desde una perspectiva más profesional.
Por otro lado, trata de flexibilizar las condiciones para facilitar y hacer más llevadero el problema de la vivienda tan latente en la actualidad.
Los inquilinos de un coliving comparten todas las zonas comunes, las cuales suelen incluir ocio y entretenimiento en sus instalaciones. Los gastos habituales, además del mantenimiento y la limpieza de áreas comunes, suponen normalmente una cuota fija incluida ya en el precio del alquiler.
Por último, la flexibilidad en las condiciones del contrato también es una de sus características principales.
Uno de los mejores ejemplos de coliving en España es Attico Liiving, quien cuenta con varias ubicaciones en Barcelona y ya visa ampliar su oferta en Madrid. Coliving.com es, por otro lado, la mayor plataforma a nivel global para encontrar y ofertar colivings por todo el mundo.
Orígenes
Como tantas otras grandes ideas, este concepto nace en Sillicon Valley a causa de la escasez de viviendas con las que se encontraban los jóvenes talentos que llegaban con nuevas oportunidades laborales. Esta circunstancia, junto con la conveniencia de juntar a estos emprendedores en un mismo espacio, dio lugar a que las empresas se plantearan invertir en este tipo de edificios y viviendas.
¿Piso compartido o una casa hotel?
Es difícil clasificar el coliving siguiendo las categorías tradicionales de alojamiento. Sin dejar de ser un piso compartido al estilo de toda la vida (cada uno su habitación y el resto de espacios de uso común), este novedoso concepto ofrece otras prestaciones que bien podrían ser las de un hotel, principalmente, de negocios.
Aunque las pretensiones de los inquilinos no sean turísticas sino más bien laborales, el coliving les garantiza una serie de servicios equiparables a los que pueda disfrutar un turista del sector MICE. Gastos fijos incluidos, servicio de limpieza (excepto en la habitación, eso sí), mantenimiento, actividades y zonas de ocio, además de un contrato bastante flexible, entre otros.
Beneficios
Con respecto a un alquiler estándar, este modelo de co-habitación presenta una serie de claros beneficios que son la clave de su éxito, sobre todo entre jóvenes emprendedores o con ciertas inquietudes profesionales.
- Alquiler sin preocupaciones. Trámites como la instalación del wifi, o la simple y engorrosa mudanza le vienen dados al inquilino. Los pisos están completamente amueblados y con Internet activo. Por otro lado, no hay fianzas. El contrato se pueden firmar por un mínimo de pocos meses o como mucho de un año. Sin tener que buscar un compañero de piso si otro se va, ni tener que cargar con sus gastos. Para entrar a vivir;)
- Servicio de mantenimiento y limpieza de zonas comunes. Algo que sirve para optimizar el tiempo de los inquilinos, quienes únicamente tendrán que preocuparse de la limpieza e su propia habitación.
- Gastos fijos incluidos. Agua, electricidad, gas, teléfono aparecen en la cuantía del alquiler como un coste fijo previamente acordado.
- Más posibilidades de socializar. Al hacer uso de las zonas comunes con otros inquilinos que, normalmente, comparten inquietudes e intereses. Frente al individualismo de la vida actual, el coliving fomenta las relaciones personales.
- Diversas propuestas de ocio. Y de una calidad bastante aceptable. Home cinema, salones con juegos de mesa, billar, gimnasio, etc.
- Coworking. El hecho de estar en un ambiente distendido con gente con la que se comparten inquietudes y aficiones facilita también la creatividad y fomenta el trabajo productivo. Ideal, este movimiento colaborativo, para los nómadas digitales.
- Descuentos y ofertas en actividades externas. Algunos colivings ofrecen bonos, descuentos u ofertas especiales a sus inquilinos en actividades de ocio. O incluso organizan encuentros o eventos de todo tipo específicamente para ellos.
Inconvenientes
- Quizá no tan asequible como parece. Aunque este concepto surge como respuesta a la falta de vivienda para jóvenes que empiezan su vida profesional y siguiendo la filosofía colaborativa del coworking, lo cierto es que las altas prestaciones que ofrecen pueden incrementar el alquiler hasta niveles no aptos para todos. De hecho, últimamente se habla del coliving como una opción de lujo para empresarios de un cierto standing. Aunque lo cierto es que hay propuestas para todos los presupuestos.
- No se desconecta del todo. Porque al estar con personas afines profesionalmente o incluso de la misma empresa, ¿de veras desconecta uno del trabajo en algún momento?
- Ni invitados, ni pareja, ni mascotas. Aunque depende de las condiciones de cada coliving en particular, lo habitual es que se alquilen las habitaciones sólo de manera individual. Por supuesto que están permitidas las visitas pero por un máximo de tiempo (uno o dos días) y siempre bajo previo aviso.
- Escasa intimidad. Lo normal cuando se comparte piso. Todo depende de lo habituados que estemos a vivir solos o compartiendo.
En conclusión, una nueva era más colaborativa, más social y menos intimista se opone y se impone al individualismo que hasta ahora regía nuestras vidas. Sea en forma de coworking, de cohousing, de coliving, o incluso de gastronomía colaborativa, esta economía y filosofía de compartir servicios, productos y sobre todo, experiencias ha llegado para quedarse. ¿Te interesa?
